Noticia: Parque La Carolina es una alternativa para celebrar el Día del Padre en familia
- Daniela Cevallos
- 24 jun 2016
- 2 Min. de lectura
El tercer domingo de junio de cada año, las familias ecuatorianas buscan festejar al “Rey del hogar”. El parque La Carolina, ubicado al norte de Quito, fue uno de los lugares escogidos para celebrar.
El Día del Padre fue la ocasión para que varias familias acudan a los diferentes espacios públicos de Quito. El pasado 19 de junio, en el parque La Carolina, se registró la presencia de los capitalinos y extranjeros que esperaban compartir en familia este día.
Algunas de las actividades que realizaron los asistentes, en este espacio público, fueron: jugar fútbol; caminar en compañía de la familia; comer al aire libre; divertirse con el teatro de la calle; trotar en la nueva pista atlética; visitar el Parque Botánico; usar los botes para navegar por la reconstruida laguna El Quinde, entre otras, destinadas a homenajear a los padres.
Ramiro Benavides, encargado de la boletería para alquilar los botes en la laguna El Quinde, manifestó que “la afluencia del público ha bajado totalmente. La primera semana luego de la remodelación estuvo repleta. Después, bajó de manera considerable, probablemente por el frío. Incluso, entre semana ya no se reporta la misma presencia de personas a esta laguna”.
Los usuarios que querían usar uno de los 52 botes a pedal durante un tiempo límite de 30 minutos tuvieron que cancelar $4 para adultos y $2, niños, valor que no ha variado desde hace dos años. El recorrido a lo largo de la laguna permite apreciar seis especies de quindes y disfrutar de los chorros y puentes acuáticos instalados.
Marcelo Lema escogió este lugar para compartir en familia porque “hay botes con los que podemos dar una vuelta y divertirnos”. Pero no es la primera ocasión que acude al parque, “busco hacerles disfrutar a mis hijos y porque hay muchos espacios verdes”, agregó.
Los comerciantes y personas que visitan con frecuencia el parque comentaron que no se registró la misma afluencia que de costumbre. Por ejemplo, los negocios de comida ubicados en los distintos puntos del parque, en especial cerca de la laguna, no tuvieron la concurrencia esperada. Verónica Saransi, vendedora de platos típicos imbabureños, señaló: “Hay poca gente probablemente porque están celebrando en sus casas. Normalmente, desde que se arregló el parque ha habido más personas”.
Manuel Conterre, vendedor ambulante del típico ponche quiteño y padre de familia, “trabajo todos los domingos en La Carolina de 11h00 a 17h00. Pero en esta fecha especial no ha habido mucha gente. Posiblemente porque se han ido más a los centros comerciales”.
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